Leticia - La hermana Celina Mota Sánchez, directora diocesana de las Obras Misionales Pontificias del Vicariato Apostólico de Leticia, Colombia, explica a Fides las iniciativas pastorales y humanitarias tomadas desde que vigen las disposiciones del gobierno para la pandemia Covid-19. Está en la ciudad de Leticia, donde pasa la cuarentena en la casa de las monjas vicentinas.
La hermana Celina subraya una cosa importante: como Iglesia, todos se han unido para apoyar a los fieles en el lado espiritual. "En unión con los sacerdotes, religiosos y religiosas, padres, maestros e hijos de la Infancia y Adolescencia Misionera , desde que se anunció la noticia, la oración familiar se ha intensificado con los niños de la IAM. Los misterios del Santo Rosario se les envía en audio, para que las familias recen el Santo Rosario todos los días. También se envía la oración de la sangre de Cristo y los dibujos, para que los niños puedan colorearlos y tener siempre a Dios en mente, tener un medio de comunicación personal con él ".
Los sacerdotes, continúa la religiosa, transmiten las celebraciones eucarísticas en las iglesias desde la estación de radio de la policía, a las 7 am, todos los días. El párroco de la Catedral de Nuestra Señora de la Paz envía el Evangelio en audio por WhatsApp todos los días para que las personas puedan escucharlo y meditar en familia. "Gracias a la acción policial, los controles se han intensificado, porque este es un territorio fronterizo donde los extranjeros van y vienen, pero ahora la situación está bajo control, cerrando la frontera. Hasta ahora no hay un caso positivo de covid-19 ". La hermana Celina concluye: "Rezo para que los niños del IAM siempre sean buenos y ayuden a sus padres en esta situación, espero que sea así y que sigan siendo juiciosos".
El testimonio de la religiosa es solo uno de los muchos que muestran cómo la Iglesia en Colombia está experimentando esta situación de crisis junto con la población.
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