Penang - Enseñar a los estudiantes la Biblia y el Corán ayuda a fomentar el respeto mutuo entre las religiones, la aceptación y la convivencia en Malasia, sostiene Norlela Ariffin, miembro musulmán del People's Justice Party elegida en la asamblea legislativa del estado de Penang, en la Federación de Malasia. Según la mujer, la Biblia en lengua malaya no debe considerarse “una amenaza” para la fe de los musulmanes, sino más bien una oportunidad para comprender otras religiones.
Desde 2017 organiza y dirige sesiones de estudio para estudiantes musulmanes, en colaboración con el Departamento religioso del estado, intentando establecer comparaciones entre el Corán y la Biblia. “Los musulmanes no deberían pensar que solo con tocar una Biblia pueden volverse impuros”. Por otro lado, la líder también organiza sesiones de estudio similares para que los estudiantes no musulmanes entiendan mejor el Islam.
La política defendió su posición cuando un líder de la oposición, Datuk Muhamad Yusoff Mohd Noor, del Barisan National, llevó el tema a la Asamblea Legislativa del estado. Según Ariffin, es apropiado que los musulmanes entiendan otras religiones y conozcan otros textos sagrados, también de los hindúes y los budistas. “Vivimos en una sociedad multicultural, es importante que nos entendamos y que aprendamos más sobre las creencias de los demás, para que no haya temor ni sospecha”, indica.
Ariffin instó a los legisladores a rechazar los prejuicios y la discriminación relacionados con la religión o el origen étnico llamando a la paz, a la armonía y a la comprensión en el país. “Nadie tiene derecho a polarizar la sociedad, más bien es necesario promover el respeto, el amor y la aceptación de otras religiones”.
Malasia es un país multiétnico, multicultural y multirreligioso. Su población está compuesta por casi 32 millones de personas, de las cuales más del 60% son musulmanes de etnia maaya. Los católicos representan solo el 4% de la población.
Publicar un comentario