Los participantes, principalmente por representantes del gobierno de Costa de Marfil, líderes religiosos y actores de la sociedad civil, han elaborado las siguientes propuestas:
1) Los participantes invitan al Estado y a las universidades a considerar la formulación de indicadores para medir el estado del desarrollo humano integral;
2) Se invita al Estado a fortalecer un marco legal que promueva la justicia social;
3) el Estado debe tener en cuenta las necesidades reales de las poblaciones que se benefician de los programas de desarrollo incluso durante la construcción de infraestructuras;
4) El estado, los partidos y los actores de la sociedad civil deben definir las intervenciones prioritarias para el país;
5) Los partidos políticos deben promover una vida democrática que sea sustancial;
6) Los líderes religiosos y creyentes están llamados a vivir la dimensión social de su fe;
7) Se invita a los actores económicos a trabajar de manera responsable, promoviendo la igualdad de derechos de los trabajadores;
8) Las familias, los educadores y los medios de comunicación deben promover una cultura de respeto y aceptación también entre las diferentes generaciones;
9) Es necesario que el Estado, partidos y actores de la sociedad civil se comprometan activamente por la paz y eviten las tensiones;
10) Se invita al Estado y a los actores económicos a alentar la producción de alimentos que permitan una nutrición sana y diversificada en el respeto a la biodiversidad.
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