El canciller de Honduras, Lisandro Rosales, presentó personalmente la solicitud al actual director del Departamento de Seguridad Nacional, Chad Wolf, como parte de una visita encabezada por el presidente Juan Orlando Hernández, quien ha viajado a Washington.
El motivo de la solicitud fue que esta decisión de Estados Unidos "ayudará a abordar el enorme desafío de la reconstrucción social y económica sostenible, post-pandemia y destrucción que Eta e Iota han dejado en Honduras". Honduras afirma que sus ciudadanos envían un promedio de $ 5 mil millones anuales a sus familiares, lo que representa un fuerte movimiento en la economía del país.
El domingo 6 de diciembre, el cardenal Óscar Andrés Rodríguez había hablado sobre la reconstrucción del país luego de los huracanes: "La reconstrucción de Honduras no la harán magos ni con dinero que fluya de otros países, será cuestión de hacer buen uso de lo que tenemos y no seguir cediendo a la tentación de explotar a los que menos tienen, de subir los precios ”. "Es un momento difícil y desolador para nuestra pobre Honduras", lamentó el Cardenal Arzobispo de Tegucigalpa durante su homilía dominical, invitándonos a preparar el camino del Señor que viene.
Una publicación en el sitio web del Servicio de Ciudadanía e Inmigración de EE. UU. confirmó que el TPS para Honduras, El Salvador, Haití, Nepal, Nicaragua y Sudán durará hasta octubre de 2021. El TPS protege a las personas que enfrentarían dificultades extremas si obligados a regresar a sus países de origen, devastados por conflictos armados o desastres naturales. La protección concierne a las personas que ya se encuentran en los Estados Unidos. El TPS para Honduras y Nicaragua se otorgó por primera vez después de que el huracán Mitch azotara Centroamérica en 1998. Algunos beneficiarios del programa han vivido en los Estados Unidos durante décadas.
Publicar un comentario