Abuja – “Los ataques de los pastores contra los agricultores son una amenaza severa que podría aumentar el hambre en el país”, afirmó Su Exc. Mons. Paulinus Chukwuemeka Ezeokafor, obispo de Awka hace unos días. “Sabemos lo que significa no tener productos agrícolas, es decir, el aumento de los precios de los alimentos con el consecuente riesgo de hambre se convertirá en el orden del día para grandes sectores de la población”, dijo el obispo de la diócesis de Awka, en Nigeria, en referencia a los ataques a los agricultores.
“Condenamos el asesinato de ciudadanos inocentes en sus granjas en algunas comunidades agrícolas por todo el país. Varios agricultores ahora tienen miedo de ir a sus granjas para evitar ser asesinados por pastores homicidas” continúo denunciando Mons. Ezeokafor el domingo 14 de junio en la homilía de la misa que presidió.
Monseñor Ezeokafor exhortó al gobierno nigeriano que tome las medidas apropiadas para detener estas masacres: “Pido al gobierno federal que ponga fin a todas las formas de asesinato de ciudadanos inocentes en el país, incluidos aquellos que trabajan en granjas para producir alimentos para nuestro pueblo”.
La Asociación de la South East Town Union, ASETU, denunció la reciente llegada de jóvenes del norte del país al sudeste. ASETU en una carta enviada a los gobernadores de los estados del área había dicho que “en el sudeste y otras partes de Nigeria, estamos presenciando el asesinato y la violación de nuestra gente por parte de los pastores. La gente ahora tiene miedo de cultivar en sus granjas, en su tierra ancestral”.
La semana pasada estuvo marcada por un baño de sangre en Nigeria con el asesinato de más de 260 personas en varios ataques por parte de Boko Haram y pandillas de pastores armados, principalmente en la región norte.
Según el Security Tracker de Nigeria, que cataloga incidentes violentos causados por desacuerdos políticos y motivos socio-económicos, el estado de Borno, con 114 muertes, registró el mayor número de víctimas, seguido por el estado de Katsina, donde murieron 75 personas.
Publicar un comentario