La situación del Seminario - con sede en la ciudad palestina de Beit Jala, cerca de Belén - y la programación de las actividades del próximo año académico habían sido objeto de una reunión realizada el 13 de enero con la participación de sacerdotes y seminaristas mayores pertenecientes al instituto. Precisamente la evaluación de algunos efectos en cadena de la pandemia ha convencido a los dirigentes del Patriarcado latino y del propio instituto patriarcal a considerar impracticable, para el próximo año, la programación normal de las actividades dirigidas a los muchachos del Seminario menor. El Rector del Seminario, el padre Jacob Rafidi, ha escrito una carta para confirmar que estas actividades se suspenden para el año académico 2020-2021.
Hasta la llegada de la pandemia, los chicos implicados en las actividades del seminario, procedentes en gran parte de Jordania, asistían a los cursos de estudio en las escuelas secundarias del seminario, residían en el instituto y dentro de la sede de Beit Jala disfrutaban también de cursos y actividades de apoyo a la formación espiritual. En la declaración - como refiere el órgano del Centro católico de estudios y medios de comunicación, con base en Jordania - el Rector Jacob Rafidi ha mencionado entre las causas de la suspensión anunciada de los cursos la imposibilidad para los estudiantes del seminario residentes en Jordania de obtener los visados necesarios para volver al instituto, visto el continuo cierre de las fronteras entre Jordania y Palestina debido a la pandemia.
En la actualidad, la situación sanitaria y epidemiológica de la región, provocada por la emergencia pandémica, no permite prever si será posible garantizar la apertura normal del año escolar 2020-2021.
El Seminario patriarcal latino, ahora situado en Beit Jala - refieren los órganos oficiales del Patriarcado latino de Jerusalén - acoge y forma desde hace más de un siglo y medio candidatos al sacerdocio para la diócesis latina de la Ciudad Santa y para otras diócesis de Tierra Santa. El Patriarca latino José Valerga lo fundó en diciembre de 1852, siguiendo la intuición católica de formar cristianos árabes locales y jóvenes procedentes del extranjero para que pudieran convertirse en sacerdotes de la Iglesia católica latina en Tierra Santa. La formación de los futuros sacerdotes está confiada al clero del Patriarcado latino. La vida del seminario, en todos estos decenios, ha gozado también del cuidado y de la entrega desinteresada de tantas congregaciones religiosas femeninas, como las Hermanas de la Merced y - en el momento actual - las Siervas del Señor y de la Virgen de Matarà.
El Seminario menor – que por ahora se ha visto obligado a suspender las actividades -, siempre ha reunido a jóvenes procedentes de todas las regiones de la diócesis, interesados en profundizar la vocación al sacerdocio, y gradualmente introducidos en una vida centrada en la oración, la comunión comunitaria y el discernimiento espiritual. La participación en las actividades del seminario menor, prepara a los muchachos a entrar en el Seminario. Hasta ahora ha formado a unos 290 sacerdotes, entre los cuales 15 obispos y 3 patriarcas: Giacomo Giuseppe Beltritti, Michel Sabbah y Fouad Twal. Hasta el año académico 2019-2020, el seminario albergaba 30 seminaristas menores y 20 seminaristas mayores, tanto palestinos como jordanos.
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