Cusco - "Anunciamos con alegría el Evangelio de la familia": este es el título de la Carta Pastoral del Arzobispo de Cusco, Mons. Richard Alarcón, recuerda que su arquidiócesis celebra en 2020 "El año misionero de la familia". Por esta razón, el Arzobispo propone una profunda reflexión sobre la familia cristiana y presenta preocupaciones pastorales, esperanzas y perspectivas "para hacer de nuestras familias un Evangelio vivo del amor de Dios".
En la carta pastoral, publicada en medio de una crisis de salud debido a la pandemia de coronavirus, Mons. Alarcón comenta sobre la importancia de pasar tiempo con la familia, lo que para muchas personas significaba redescubrir "la belleza de la vida familiar" y para otros era "como un termómetro para medir hasta qué punto el amor y el compromiso de padres, hijos y familiares están realmente presentes ".
Como se señala en la nota enviada a Fides, el documento también menciona cuán dolorosa fue la desaparición de un ser querido debido a COVID-19 para algunas familias, recordando las consecuencias que el virus ha traído consigo, como la crisis económica y el desempleo. La carta también señala cómo se ha despertado la solidaridad "para apoyarse y ayudarse mutuamente".
"Este momento debería ayudarnos a tomar conciencia de las lecciones que esta pandemia nos está dejando", dice el Arzobispo del Cusco, tratando de indicar un nuevo futuro para las familias, las comunidades y toda la nación. "Al mismo tiempo, concluye, después del aislamiento social y pandémico debemos mostrar y vivir un modelo renovado de vida familiar", capaz de indicar un cambio virtuoso y generalizado en la sociedad.
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