AMERICA/EL SALVADOR - Los obispos: "Cuánto nos falta como país para lograr una vida digna para todos los ciudadanos"

San Salvador - Ante la solemnidad de Pentecostés, los obispos de El Salvador enviaron un mensaje de esperanza y cercanía al pueblo de Dios en este período de pandemia, instando a las autoridades a un diálogo corresponsable que les permita enfrentar la crisis nacional. "Este es el pensamiento fundamental de mi predicación: nada me importa tanto como la vida humana". Inspirados por esta frase de San Oscar Romero, que sigue teniendo toda su relevancia, los obispos de El Salvador han expresado su cercanía en este período ante la crisis causada por la pandemia de Covid-19. "Porque nada le importa tanto a la Iglesia como la vida humana, escriben, quienes durante los años de la guerra denunciaron los abusos contra la dignidad de la persona humana y anunciaron implacablemente el plan del Padre: reconciliar a los hombres con Dios y entre ellos" .
Con respecto al estado, los obispos comentan: "Cuánto nos falta como país para lograr una vida digna para todos los ciudadanos", ante las consecuencias de la pandemia en los sectores más vulnerables del país. "Los despidos, el desempleo, el hambre, la falta de trabajo amenazan a muchos de nuestros compatriotas", denuncian los obispos. Ante esta realidad, en particular apelan a "líderes y empresas privadas" para que se comprometan a que nadie quede excluido de la vida nacional.
En Pentecostés, los obispos salvadoreños vieron la acción del Espíritu de Dios en la historia, a través de la gente, que en estos tiempos de crisis mostró las mejores actitudes: "Felicitamos al personal médico y de salud que se ocupa con tanto heroísmo de los enfermos, luchando contra el coronavirus. Felicitamos a todos por sus esfuerzos también para ayudar a nuestros hermanos más pobres, la preocupación por el hermano de al lado, el cuidado de los ancianos y los niños ".
Finalmente, el Episcopado nos invita a orar para que Dios otorgue a todos, incluso a los líderes, la gracia de la comunión y el diálogo. "De esta manera, concluyen, seremos un solo pueblo que trata de vivir en paz, en hermandad y en unidad".