Bangalore – “Les doy las gracias por esta invitación que me ha traído por primera vez en mi vida a la India, un país que ofrece muchas promesas para el futuro de la Iglesia. Deseaba venir personalmente para compartir con ustedes nuestra gratitud por el trabajo que están realizando y para alentarles en el gran esfuerzo de evangelización que llevan a cabo”. Con estas palabras, el Arzobispo Giovanni Pietro Dal Toso, Secretario Adjunto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos y Presidente de las Obras Misionales Pontificias, ha iniciado hoy su discurso durante el Simposio sobre la Nueva Evangelización, que tiene lugar en Bangalore del 7 al 9 marzo organizado por las Obras Misionales Pontificias.
Mons. Dal Toso ha presentado el origen y la finalidad de las cuatro Obras Misionales Pontificias iniciando por el significado auténtico de la misión, es decir partiendo del mandato de Jesús antes de su ascensión al Padre, “ya que el mandato de la iglesia de anunciar el Evangelio no puede justificarse sino solamente en la misión de Cristo”. Y citando la Sagrada Escritura, el Concilio Vaticano II y el magisterio de los últimos Pontífices, el Arzobispo ha subrayado que “no se trata de difundir una ideología, una cultura o una nueva moralidad”, sino que “la misión de la iglesia es que toda persona pueda recibir el don del Espíritu Santo: del encuentro personal con Cristo que ha muerto y resucitado de entre los muertos por cada uno de nosotros, hemos llegado a conocer la vida eterna, que a nuestra vez tenemos que compartir con los demás”. Las Obras Misionales Pontificias “tienen un significado concreto, porque comparten y sostienen esta misión de la Iglesia”.
Luego el Presidente de las OMP ha presentado las cuatro Obras Pontificias remarcando el contexto histórico en el que nacieron, sus fundadores y fundadoras, sus finalidades, la estructura actual, el significado del reconocimiento de “Pontificias”. “El Pontificado del Papa Francisco sin duda ha reforzado y consolidado el espíritu misionero en toda la iglesia” ha continuado diciendo el Arzobispo, en un momento histórico en el que “el fervor misionero parece disminuir dentro de la iglesia” por diferentes razones, internas y externas. A pesar de todo “¡debemos tener esperanza!”, ha exhortado, porque “si es cierto que la fe se ha debilitado numéricamente, también es cierto que estamos asistiendo a un florecimiento de iniciativas y carismas, a menudo realizadas por laicos, inspirados por Dios para ayudar a la Iglesia a evangelizar en este difícil momento histórico”.
En la última parte de su intervención, Mons. Dal Toso ha hablado del Mes Misionero Extraordinario, de octubre de 2019, invitando a todos “a iniciar a preparar este Mes, haciendo que se conozca en todas las diócesis y archidiócesis de este país y más allá; animando las iniciativas locales para hacer del anuncio de la Buena Nueva de Cristo el centro del plan pastoral de la iglesia local”.
Al finalizar su ponencia, Mons. Dal Toso ha presentado el taller dedicado al Mes Misionero Extraordinario, volviendo a recorrer las etapas de su convocación, los motivos y las iniciativas que ya están en marcha: “El objetivo esencial radica en la renovación espiritual y pastoral de la conciencia personal y comunitaria y del compromiso con la misión de la Iglesia, para regenerar el celo y la pasión misionera en cada corazón cristiano. El n.15 de la Evangelii Gaudium por lo tanto, representa la guía de todos nuestros esfuerzos, oraciones y reflexiones para este mes”.
Link correlati :El texto completo de la ponencia de Mons. Dal Toso (en inglés) El texto completo de la introducción al workshop de Mons. Dal Toso (en inglés)
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