Kolowaré - “La apertura de las conversaciones tendrá lugar el 15 de febrero en Lomé”, así se ha sido anunciado a través de una declaración emitida por la televisión nacional de Togo, suscrita por el ministro para la Seguridad de Ghana, Albert Kan-Dapaah, y por el Ministro de Estado de Guinea, Tibou Kamara, -enviados por sus respectivos presidentes, Nana Akufo-Addo y Alpha Condé-, y propuestos por la Comunidad Económica de Países de África Occidental como mediadores entre el gobierno y la oposición para encontrar una solución a la crisis de Togo. “Se ha hecho pública finalmente la fecha del inicio del diálogo entre las partes”, declara a Fides el padre Silvano Galli, sacerdote de la Sociedad de Misiones Africanas ,y misionero en Togo. Los delegados de ambos mediadores estaban presentes en Lomé entre el 31 de enero y el 1 de febrero para llevar a cabo las consultas con el gobierno y la coalición de los 14 partidos de la oposición que han organizado manifestaciones de protesta casi cada semana durante 5 meses pidiendo la dimisión del presidente Gnassingbé .“La fecha se acordó con los principales protagonistas”, se lee en el declaración oficial. Los mediadores insisten, sin embargo, en el hecho de que no se organizará ninguna manifestación a partir de este día y a lo largo de las negociaciones. La oposición subraya que “es necesario aclarar algunos puntos”. Los líderes de la coalición han asegurado a sus militantes que estarán presentes en la mesa de diálogo con el gobierno el 15 de febrero pero con una “actitud vigilante animando al gobierno a seguir hasta el final con las medidas de pacificación”, ha declarado Jean-Pierre Fabre. Entre estas medidas, Fabre incluye la retirada de las fuerzas de seguridad del norte del país, la liberación de los militantes de la oposición detenidos durante las manifestaciones y durante los incendios de los mercados de Kara y de Lomé. “Estas medidas no son negociables. Deben ser tomadas antes de que comiencen las negociaciones”, ha advertido el líder de la coalición. Los mediadores ghaneses y guineanos han respondido que, aunque serán juzgados con un procedimiento rápido y considerando los atenuantes, los autores de los delitos “serán juzgados en conformidad con los procesos legales del país” que no pueden ser anulados.
“El clima es todo menos optimista, más bien se extiende la desconfianza. La gente siente que ha sido engañada durante 20 años”, asegura el padre Silvano. “Y todo a pesar de los años de diálogo, en los que también participó el obispo de Atakpamé, monseñor Barrigah, ex diplomático, quien después de muchas reuniones y discusiones, presentó una serie de propuestas, que fueron completamente ignoradas. La única nota positiva de estos años, si se puede considerar como tal, -concluye el misionero- es que las personas pueden expresarse libremente en los medios y las redes sociales, aunque por desgracia lo hacen con poca educación”.
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