Kinshasa - “Denunciamos la campaña de descrédito y difamación de la Iglesia Católica y de su jerarquía”, dice la Conferencia Episcopal Nacional del Congo en la declaración publicada al final de la Asamblea Plenaria Extraordinaria, celebrada en Kinshasa del 15 al 17 de febrero. Los Obispos de la República Democrática del Congo afirman estar “profundamente preocupados por los hechos serios y las actitudes hostiles” mientras el país se prepara para las elecciones presidenciales y legislativas programadas para el 23 de diciembre.El documento, recibido en la Agencia Fides, denuncia “la represión sangrienta” de las manifestaciones pacíficas del 31 de diciembre de 2017 y del 21 de enero de 2018, promovido por el Comité de Coordinación Laica , una organización católica laica. “¿Por qué tantas muertes, heridos, arrestos, secuestros, ataques a parroquias y comunidades eclesiásticas, humillación, tortura, intimidación, profanación de iglesias, prohibiciones para orar?” denuncian los obispos, que recuerdan que los manifestantes exigieron pacíficamente la plena aplicación del Acuerdo del 31 de diciembre de 2016, mediado por la CENCO y destinado a llevar el país lo antes posible a las elecciones.
“La comunidad nacional e internacional es testigo de una serie de campañas de intoxicación, descrédito y difamación destinadas a debilitar la fortaleza moral de la Iglesia, en particular de Su Eminencia el Cardenal Laurent Monsengwo , y a desviar la atención de la población de los problemas reales”, afirma la declaración.
También preocupa a los obispos, la extensión en las zonas de inseguridad en diferentes provincias: “en el Gran Kasai, en Kivu del Norte y del Sur, en Ituri, la presencia de asaltantes que siembran la muerte y la desolación hace pensar en la puesta en marcha de un plan de ocupación y balcanización” escriben los obispos. “En esta etapa del proceso electoral, uno tiene derecho a preguntar: ¿quién se beneficia de la desestabilización del país?”.
Las tensiones aumentan por la falta de implementación de la totalidad de los Acuerdos del 31 de diciembre de 2016, especialmente en lo que respecta a la libertad de prensa, la liberación de los presos políticos y el regreso a casa de los opositores exiliados en el extranjero y por la controversia sobre las máquinas electrónicas electorales proporcionadas por la Comisión Electoral Independiente . La oposición, la sociedad civil y algunos socios internacionales de la República Democrática del Congo dicen que estos instrumentos, destinados a acelerar las operaciones de votación y su recuento, representan un problema más que una solución, porque se teme que se utilicen para trucar las elecciones.
La CENCO reafirma la urgencia de votar en el 2018 y pide la aplicación integral del Acuerdo de San Silvestre, permitiendo la libertad de expresión y de manifestación, y la liberación de aquellos arrestados durante las manifestaciones previas.
“A diez meses de distancia de la votación, seguimos apelando a la responsabilidad de las personas e instituciones responsables de preparar y organizar las elecciones en el interés supremo de la nación. Que por la intercesión de la Santísima Virgen María, Nuestra Señora del Congo y Reina de la Paz, Dios bendiga a la República Democrática del Congo y a su pueblo” concluyen los Obispos.
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