Muhanga - Las mujeres y los niños se someten a larguísimos y difíciles viajes diarios para abastecerse de agua, utilizando bidones de 20 litros, que transportan a mano, y privando a los niños de la posibilidad de asistir a la escuela: esta es la situación comunicada por las Hermanas Oblatas del Espíritu Santo, quienes han solicitado ayuda al Movimiento de Lucha contra el Hambre en el Mundo para hacer frente a esta situación tan crítica en el distrito de Muhanga, en el sur de la provincia de Rwanda. Según informa una nota enviada a la Agencia Fides, las mujeres y los niños caminan todos los días muchos kilómetros a pie para conseguir agua limpia. Peor ahora, gracias al proyecto apoyado por la ONG, cerca de la escuela de la aldea de Kinini, se ha inaugurado la primera fuente del acueducto de Mbare y los habitantes pueden beber agua fresca. Después de completar el proyecto en la aldea de Kinini, localidad de Mbare, distrito de Muhanga, se podrán beneficiar más de 10 mil personas, incluidos los habitantes de la aldea, los usuarios del centro pastoral, los estudiantes del centro profesional femenino y de las escuelas cercanas, la misión de la congregación de las Hermanas Oblatas del Espíritu Santo.El área de referencia de este proyecto, como la mayoría del país, es montañosa, con casas dispersas, y vías de comunicación escasas e insuficientes. El problema fundamental está representado por la ausencia de un sistema eficiente de distribución de agua adecuado a las necesidades de la población local. Miles de personas no tienen acceso al agua y viven en áreas hostiles para el hombre y con poca disponibilidad hídrica. Rwanda sufre una aguda sequía que tiene a la población extremada. La población que se beneficia del proyecto también podrá recibir formación y sensibilización en materia de prevención socio sanitaria, de cuestiones de higiene y de uso correcto del agua, en colaboración con la ONG rwandesa APH.
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