ÁFRICA/CONGO RD - Iglesias profanadas en Mbujimayi y el arzobispado de Kinshasa atacado: condena de los obispos

Kinshasa – “Se trata de actos deliberados de profanación, despreciables y particularmente repugnantes”. Así, Su Exc. Mons. Bernard-Emmanuel Kasanda Mulenga, obispo de Mbujimayi, ha calificado la profanación una docena de iglesias de su diócesis, situada en Kasai, en el centro de la República Democrática del Congo.
Entre ellas se encuentran la catedral de Saint Jean-Baptiste de Bonzola de Mbujimayi, y las parroquias de Saint Amand, Sainte Bernadette de Nkolongo, Saint Vincent de Paul de Nkuadi, Christ Roi de Kansansa y otras.
Mons. Kasanda ha pedido que se realice una sentencia “extremadamente ejemplar, firme y rápida” contra los autores. Desde hace casi cuatro meses, los lugares de culto de Kasai, región de la que procede el presidente congoleño Félix Tshisekedi, son objeto de una “profanación progresiva y sistemática”. “Han robado tabernáculos, vasos sagrados, piedras y manteles de altar, copones, muebles y estatuas del Sagrado Corazón de Jesús y de la Virgen María”, denuncia el obispo.
Un portavoz del gobierno provincial ha declarado que Mons. Kasanda ha facilitado a la policía algunos datos para tratar de encontrar los objetos sagrados robados, señalando como posibles autores de las profanaciones tanto a grupos “desviados” dentro de la Iglesia como a “aquellos del mundo fetichista que piensan que pueden consolidar su pseudo-poder apoderándose de las cosas sagradas de la Iglesia católica”.
De fondo, persisten las tensiones entre la Iglesia católica y el gobierno por el fracaso en la elección del presidente de la Comisión Electoral Nacional Independiente , que debe ser designado por las principales confesiones religiosas congoleñas. El 23 de julio, el padre Donatien Nshole, portavoz de las confesiones religiosas, denunció que estaban sufriendo “presiones, intimidaciones y amenazas de todo tipo contra algunos miembros de la plataforma de confesiones religiosas para impedirnos realizar libremente nuestro trabajo”.
La Conferencia Episcopal y la Église du Christ au Congo se oponen a la candidatura de Denis Kadima, propuesto por otras seis confesiones religiosas por considerarlo demasiado cercano al presidente Félix Tshisekedi.
Además, el domingo 1 de agosto, unos manifestantes lanzaron piedras contra el Arzobispado de Kinshasa. “Un grupo de personas no identificadas se presentó en el arzobispado de Kinshasa y en la residencia del cardenal Fridolin Ambongo, entonando cánticos y frases insultantes y cometiendo actos violentos”, informa el padre Georges Njila, canciller de la archidiócesis de Kinshasa.