Lagos - “Las autoridades del estado de Lagos, así como otros estados nigerianos en los que la propagación del coronavirus supone una mayor amenaza , han impuesto el cierre de escuelas y mercados y animan a toda la población a quedarse en casa y seguir estrictas normas de higiene. Sin embargo, la situación en Nigeria varía entre los diferentes estados. Aquí se prohíben las reuniones de más de 20 personas y, por tanto, se han suspendido las misas con las personas. Transmitimos regularmente misa desde la catedral a través de la televisión y estamos activos en las redes sociales": con estas palabras comenta la situación, en una entrevista con la Agencia Fides, el arzobispo de Lagos, Mons. Alfred Adewale Martins.
Por el momento no existe una estrategia nacional a pesar de que el sistema federal de salud de Nigeria está comenzando a prepararse. El Arzobispo señala: "El gobierno central está reaccionando gradualmente. El primer movimiento ha sido el de cerrar las fronteras y creemos que es una medida justa, luego se está llevando a cabo la desinfección y el saneamiento público. Creemos que es importante aumentar la capacidad de realizar los test y encontrar mejores soluciones logísticas para las personas en cuarentena. Las buenas noticias provienen del sector privado que está brindando apoyo al Estado tanto con test como poniendo a disposición lugares de acogida para las personas contagiadas. En cualquier caso, desde el 26 de marzo, en ningún Estado hay un bloqueo total. Las personas parecen ser cada vez más conscientes de los riesgos según pasan las horas. Aquí, por ejemplo, las calles están desiertas desde hace días. Esto nos da la esperanza de que el virus pueda ser contenido”.
Mientras tanto, la vigilancia en las calles por parte de las agencias policiales ha comenzado, que en algunos casos han entrado en los lugares de oración. “Afortunadamente -continúa el prelado-, no ha habido actitudes intimidantes, la policía se está comportando bien. Esperemos que continúe así, sin forzar los derechos porque la gente ya está muy nerviosa y estresada por la situación".
Los fieles entienden la situación y actúan en consecuencia. La posición y las indicaciones de la Iglesia de Nigeria difieren de un área a otra. Por ejemplo, ha causado cierto escándalo la declaración del arzobispo Obinna de Owerri, que declaró recientemente "Continuaremos a intercambiarnos la paz y a distribuir la comunión en la boca”. “A veces hay disparidades en las opiniones u opiniones engañosas. Las declaraciones del arzobispo de Owerri, creo, se deben al hecho de que en su área los contagios son muy pocos o inexistentes. Sin embargo, nosotros somos muy cuidadosos y seguimos fielmente todas las precauciones y medidas ordenadas por las autoridades ".
Con 155 millones de habitantes, Nigeria es el país más poblado de África y observa con terror la propagación del coronavirus en el continente. Los contagiados en África continúan creciendo: la nación más afectada es, sin duda, Sudáfrica, mientras que aquellos libres del virus cada vez son menos. En Nigeria, hay poco más de 50 casos, 30 de ellos en el estado de Lagos, y la alarma está comenzando a extenderse.
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