Citando a un científico jesuita filipino, el padre Jett Villarin, antiguo presidente de la Universidad Ateneo de Manila, el obispo David ha declarado que los candidatos sólo tendrían que: "Seguir los mandamientos. No matar. No robar. No mentir. Observando estos principios, ya estás bien encaminado”. “Deberíamos avergonzarnos de llamarnos cristianos – ha añadido -, si no participamos activamente en la consecución de candidatos de confianza para los cargos públicos. Es decir, tenemos que tener en cuenta el futuro de nuestro país”.
La autoridad política, ha explicado el obispo David, no consiste en ser "dueños del pueblo", sino en prestar un servicio. "Jesús no es un votante en las próximas elecciones – ha dicho de forma provocativa -. Pero nosotros sí que lo somos. Nos ha confiado la tarea de hacer esta importante elección” ha continuado el prelado. “¿Responderemos o no a su llamada a ser administradores responsables de nuestra nación que tanto ama el Señor y que ya ha salvado muchas veces de la destrucción?”, ha concluido con énfasis.
Un líder laico católico, Mon Santiago, haciéndose eco del llamamiento del obispo, ha afirmado: “Seguimos rezando para que los votantes elijan sabiamente en las elecciones de mayo de 2022 y se inclinen por personas que estén dispuestas a servir al pueblo y a nuestro país por el bien de esta y de las futuras generaciones. Que Dios bendiga las Filipinas”.
Mientras el debate público continúa, incluso dentro de las comunidades católicas, el jesuita padre Manoling V. Francisco SJ, presidente de la “Fundación Tanging Yaman” observa: “debemos usar nuestro sagrado deber de votar eligiendo a hombres y mujeres temerosos de Dios que no actúen por el honor y la gloria personal o nacional, sino sobre todo por la gloria de Dios”.
De cara a las elecciones generales, previstas para el 9 de mayo de 2022, se espera que la Comisión Electoral publique antes de enero de 2022 la lista definitiva de candidatos oficiales, incluidos los que se presentan para el cargo de presidente, vicepresidente, para los escaños de 12 senadores y 308 miembros de la Cámara de Diputados.
Luego están los candidatos a los escaños de 81 gobernadores y vicegobernadores, 780 escaños en los consejos provinciales, 1.634 alcaldes y tenientes de alcalde de los municipios, 13.546 escaños en los consejos municipales. Según la Constitución filipina de 1987, las elecciones generales se celebran cada seis años, el segundo lunes de mayo.
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