“El amor, la perseverancia y la humildad son algunos de los requisitos básicos para tener éxito en el ministerio sacerdotal. Quien es llamado a servir como sacerdote - se lee en la nota recibida por la Agencia Fides - debe ser acompañado en un sólido camino espiritual y apoyado en la formación, con el objetivo de lograr un resultado positivo en la Iglesia”.
El obispo ha pedido a los sacerdotes que se mantengan centrados y firmes a pesar de los desafíos y, sobre todo, que confíen en la providencia y el cuidado de Dios. “Debemos permanecer comprometidos y decididos en el cumplimiento de nuestras obligaciones sacerdotales a pesar de los muchos desafíos que afligen a la Iglesia hoy en día”, ha dicho dirigiéndose a los sacerdotes presentes.
Al agradecer a todos los que han contribuido a su camino sacerdotal desde su ordenación en 1986, Mons. Sanctus ha reconocido el gran apoyo que le dieron sus padres, así como todos los que le guiaron durante su formación.
Su Excelencia Monseñor Sanctus Lino Wanok fue ordenado sacerdote en 1986. En 2011, fue consagrado tercer obispo de la diócesis de Nebbi antes de ser nombrado ordinario de la diócesis de Lira en 2018.
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