Monseñor Joaquín Humberto Pinzón Güiza I.M.C., Obispo encargado del Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo-Solano, durante una entrevista con el Departamento de Comunicaciones de la Conferencia Episcopal de Colombia, explicó en qué consiste esta iniciativa que están emprendiendo las dos Iglesias vecinas. El obispo explicó que la Iglesia quiere seguir los caminos sugeridos por el Sínodo de los Obispos, que invitan a la creación de nuevas estructuras eclesiales que les permitan responder mejor a la realidad de estos territorios indígenas. más allá de las barreras fronterizas.
“Compartimos el territorio con San José de Amazonas en Perú, donde se encuentran dispersas muchas comunidades indígenas a los lados del río Putumayo, en la frontera de Colombia y Perú. Nos preguntamos cómo llegar a estas comunidades con una presencia más constante y cercana. Por eso hemos pensado en cómo unirnos como Iglesia local y crear un equipo misionero que responda a la realidad del territorio, yendo más allá de las fronteras nacionales ”, explicó el prelado en la entrevista.
En este contexto, estas dos Iglesias hermanas han tomado la iniciativa de fundar la estación misionera, animadas por un equipo intervicario, que se encargará de la acción pastoral en estos territorios. El equipo tendrá la tarea de mantener un análisis actualizado de la realidad de las comunidades y sus territorios y, de acuerdo con las orientaciones pastorales sugeridas por los dos Vicariatos Apostólicos, dar respuesta a las necesidades y desafíos de estos pueblos indígenas.
En la nota enviada a la Agencia Fides por la Conferencia Episcopal de Colombia, leemos que en estos territorios hay una falta de asistencia estatal para las necesidades básicas de las comunidades, y la realidad está marcada por la pobreza y la violencia. Además, “hay varios grupos que trabajan en el narcotráfico. Todos estos problemas generan violencia y el desplazamiento de comunidades ”, subrayó Mons. Pinzón Güiza.
A través del nuevo centro pastoral, la Iglesia se propone trabajar en tres objetivos específicos: 1. Estar presente. La Iglesia desea acompañar a las comunidades para fortalecer los procesos que allí se desarrollan. 2. Ser creadores de esperanza. En medio de un paisaje lúgubre, donde no hay caminos anchos, queremos traer sentimientos de esperanza. 3. Mostrar la riqueza cultural de las comunidades amazónicas y promoverla.
"Ambos Vicariatos han firmado un decreto que establece la formación de este nuevo centro pastoral o estación misionera, que a su vez estará bajo la responsabilidad de un equipo que se ha constituido, con el fin de promover la atención pastoral y territorial de ambos esponde" concluyó el Vicario Apostólico.
Del lado colombiano, el Vicariato Apostólico de Puerto Leguízamo-Solano, está ubicado en la provincia eclesiástica de Villavicencio, tiene un territorio de 56.000 Km2 y una población de 58.600 habitantes con 48.638 católicos agrupados en 7 parroquias.
Del lado peruano, el Vicariato Apostólico de San José del Amazonas, presidido por Monseñor José Javier Travieso Martín, CMF, está ubicado en la provincia de Maynas, tiene un territorio de 150.247 km2 y una población de 201.350 habitantes, de los cuales 147.200 católicos. y 11 parroquias.
La frontera entre Colombia y Perú tiene 1.626 kilómetros de largo. Buena parte está marcada por el río Putumayo. Esta zona es de muy difícil acceso ya que se encuentra en medio de la selva amazónica.
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