Chiang Mai - Está en marcha un gran compromiso de la Iglesia en Tailandia para rescatar, acoger y ayudar a los refugiados que huyen de Myanmar y se esconden en la selva cerca del río Thanlyin, que marca la frontera entre Tailandia y Myanmar. Según ha confirmado a la Agencia Fides Mons. Francis Xavier Vira Arpondratana, Obispo de Chiang Mai, el equipo diocesano de voluntarios formado por laicos, sacerdotes y religiosas está llevando ayuda y promoviendo iniciativas de solidaridad en dos localidades cercanas a la frontera entre Tailandia y Myanmar, justo al sur del Parque Nacional de Salawin, en Tailandia. Según la información de la Agencia Fides, Mons. Vira ha hecho un llamamiento a las distintas comunidades religiosas del país para que acudan con ayuda en dinero, agua, alimentos, medicinas y otros bienes necesarios para distribuirlos entre las personas que huyen del conflicto en Myanmar, procedentes del estado de Kayin .
La hermana Aranya Kitbunchu, presidenta de la Federación de Superiores Religiosos de Tailandia, dirige la operación de ayuda con la colaboración de la Diócesis de Chiang Mai y Cáritas Tailandia.
“Los refugiados están en una situación desesperada: necesitan alimentos, agua, medicinas y otros servicios básicos para sobrevivir en estos tiempos difíciles”, informa la hermana Kitbunchu, que coordina a los voluntarios y a los representantes de varias congregaciones religiosas.
La emergencia de los refugiados en la frontera entre Myanmar y Tailandia comenzó el 27 de marzo, cuando los militares lanzaron varios ataques aéreos nocturnos sobre cinco zonas del municipio de Lu Thaw, en el distrito de Mutraw, matando a tres civiles e hiriendo a otros siete. Los ataques obligaron a más de 10.000 personas a esconderse aterrorizadas en el bosque, mientras otras 3.000 personas más de la etnia karen buscaron refugio en Tailandia.
La Organización de Mujeres Karen ha pedido “una resolución urgente del Consejo de Seguridad de la ONU para llevar la situación de Birmania ante el Tribunal Penal Internacional”. La Red Europea Karen ha pedido al gobierno tailandés que detenga la repatriación forzosa de los refugiados karen a Myanmar: Según la organización, de hecho, las autoridades tailandesas han bloqueado la llegada de ayuda humanitaria a los refugiados y han empezado a obligarles a regresar al Estado de Karen, a pesar del peligro de nuevos bombardeos. La población del Estado de Karen – con el 20% de cristianos - lleva más de 60 años viviendo el conflicto entre los militares y la Karen National Union , el grupo armado que representa a la población karen, que en los años 80 contaba con 10 mil soldados. A lo largo de los años, el conflicto civil ha generado al menos 500.000 desplazados internos y más de 130.000 refugiados que se han visto obligados a vivir en condiciones extremadamente difíciles en los campos de refugiados de Tailandia.
Los militares birmanos tomaron el poder el 1 de febrero mediante un golpe de Estado, declarando el “estado de emergencia” durante un año, tras acusar a la Liga Nacional de la Democracia, el partido de la líder civil Aung San Suu Kyi, de realizar detenciones. Además de las protestas en todo el país contra la toma del poder por parte de los militares, con manifestantes a favor de la democracia y decenas de miles de personas en las calles, los combates entre los militares de Myanmar y varios ejércitos de minorías étnicas, como la Karen National Union , se han reavivado a pesar de la represión militar.
En Myanmar hay 135 comunidades étnicas, que constituyen un tercio de la población nacional de 56 millones de personas. Los grupos minoritarios más numerosos son los shan y los karen , mientras que los demás representan en conjunto un 5% de la población.
Publicar un comentario