Beirut – Después de que 24 sesiones parlamentarias convocadas para la elección de un nuevo presidente no hayan dado un resultado, este martes, 16 de junio una multitud de personas ha acompañado hasta el Parlamento libanés la imagen de Nuestra Señora de Fátima, que ha llegado al Líbano desde el Santuario portugués, creando de este modo, un encuentro con cantos y oraciones para pedir la intercesión de la Virgen María por el País de los Cedros para que salga de la peligrosa parálisis política que lo aqueja desde hace más de un año.La estatua de la Virgen, que ha llegado al Líbano la semana pasada, ha sido transladada a la catedral maronita de San Jorge este martes 16 de junio, en el centro de Beirut, donde se ha celebrado una Misa presidida por el arzobispo maronita Boulos Youssif Matar. Después de la liturgia eucarística, la estatua ha sido llevada en procesión hasta el edificio del Parlamento, mientras que cientos de fieles han llenado la plaza Nejmeh. En el patio interior de la sede institucional, con la autorización del Presidente de la Asamblea Parlamentaria, se ha recitado una oración para pedir a la Madre de Dios que mueva a los políticos libaneses para superar las divisiones y para elegir a un nuevo presidente. El evento ha contado con la presencia de políticos cristianos de los diferentes bloques que desde hace más de un año no logran llegar a un acuerdo para elegir a un nuevo jefe de Estado .
“El estancamiento político - informa a la Agencia Fides el padre Rouhael Zgheib, Director Nacional de las Obras Misionales Pontificias del Líbano - pesa gravemente sobre la situación concreta de las personas, y amenaza la estabilidad de la nación, en un momento en que toda la región está devastada por los conflictos. Los fieles en la oración a menudo piden cosas muy concretas, como el don de la paz y la curación de las enfermedades. Y la parálisis de nuestro sistema político realmente podría convertirse en una enfermedad peligrosa para la vida de todos”. .
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