Londres - Se está delineando un conflicto diplomático entre el Reino Unido y España, por un lado, y Ruanda, por otro, debido a la detención en Londres del general Emmanuel Karenzi Karake, jefe de seguridad e inteligencia en Ruanda. La detención del general ruandés tuvo lugar el 20 de junio por ejecución de la orden de arresto emitida en España, de acuerdo con la legislación española sobre la jurisdicción universal para crímenes contra la humanidad cometidos en todo el mundo.
El general Karake es uno de los 40 oficiales ruandeses acusados en 2008 por un juez español de presuntos delitos de genocidio, crímenes contra la humanidad y otros delitos, incluidos el asesinato de ciudadanos españoles cometidos entre 1994 y 1997. En 2007, Human Rights Watch pidió a la ONU que investigue al general Karake en relación con las masacres cometidas por las tropas ruandesas en la ciudad congoleña de Kisangani. La detención del jefe de inteligencia de Ruanda ha provocado fuertes reacciones por parte del Ministro de Relaciones Exteriores de Kigali, Louise Mushikiwabo, quien lo ha definido como algo “inaceptable”.
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