Nueva Delhi – “Es extremadamente importante para nosotros conocer la situación actual con el fin de lograr la paz, la justicia y la dignidad en la sociedad. Las industrias y grandes empresas mineras se están estableciendo en las áreas tribales. Esta es la principal causa de gran preocupación para el desarrollo de los pueblos indígenas” lo ha dicho Su Exc. Mons. Niranjan Sual Singh, Obispo de Sambalpur, en Orissa, al inaugurar un seminario organizado en Orissa por la Comisión Justicia, Paz y Desarrollo de la Conferencia de episcopal de la India. Según ha informado a la Agencia Fides, el seminario, promovido por el p. Charles Irudayam, Secretario de la Comisión Episcopal, se ha celebrado del 19 al 20 de mayo con el tema “Explotación minera y migración”. A ella han asistido unos 60 delegados de diversas diócesis de Orissa.“Una sociedad puede tener buenas carreteras, ferrocarriles, viviendas, pero los pobres y los oprimidos deben recibir mayor atención para su desarrollo integral”, ha recordado el arzobispo, centrando la discusión en dos fenómenos: la minería y la migración.
El primero “tiene un impacto devastador en los pueblos tribales, ya que trae la degradación ambiental y la contaminación. Los pueblos tribales son completamente dependientes de sus tierras para su sustento”, ha señalado. El fenómeno afecta a toda la nación. Dayamani Barla, un activista por los derechos de los dalit y tribales, ha recordado que “los pueblos indígenas son los colonos y los habitantes originales de la tierra. Su vida, su conducta, el lenguaje y la ética tienen una conexión directa con el agua, la tierra y la selva. La cultura Adivasi muere desde el momento en que se ven obligados a abandonar su entorno: los pueblos indígenas son desplazados en nombre del desarrollo”.
El P. Charles Irudayam, en su discurso, ha dicho a los participantes que la Iglesia está preocupada por los derechos humanos y porque los católicos se involucren en temas sociales: “Dios ha dado a cada ser humano una dignidad intrínseca e inalienable, que comporta derechos fundamentales. La Iglesia tiene el deber de proteger los derechos humanos y de educar a sus miembros sobre la dignidad, la libertad y la igualdad de todos los seres humanos. El respeto de los derechos humanos es un requisito previo para la paz”".
P. John Kerketta, Director de Servicios Sociales de la diócesis de Sambalpur, ha concluido afirmando que “la Iglesia ha jugado un papel significativo en Orissa, en el campo de la educación, la salud y el trabajo social”, reiterando que seguirá trabajando por la defensa de la dignidad de cada hombre.
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