Chattogram - “Hoy podemos decir con certeza, con alegría y emoción, que los católicos en Bangladesh somos el fruto del trabajo misionero y que la misión es nuestra vocación”. Son las palabras del obispo Moses Costa, arzobispo de Chattogram y secretario de la Conferencia de Obispos de Bangladesh, para la Agencia Fides en preparación del Mes Misionero Extraordinario de octubre de 2019.
En una carta pastoral escrita a su comunidad diocesana y enviada a la Agencia Fides, el arzobispo recuerda: “2018 fue un año lleno de alegría para nosotros, los católicos en Bangladesh: recordamos respetuosamente a quienes sembraron las semillas del cristianismo y ayudaron a escribir una historia gloriosa y santa. Celebramos 500 años desde la llegada de la fe cristiana a Bengala Oriental . Después llegaron a Chattogram los primeros portugueses para dedicarse al comercio. Durante los primeros 80 años no hubo un sacerdote para su cuidado pastoral o para celebrar los sacramentos. En 1598 llegó el padre jesuita indio Francesco Fernández, el primer misionero católico en esta tierra, quien por su fe cristiana fue torturado y murió en la esclavitud el 14 de noviembre de 1602. Es el primer mártir de Bengala, recordando esta historia con emocióncelebramos nuestro Jubileo de la presencia de la fe cristiana en Chattogram”.
El arzobispo destaca cómo los sacerdotes, las religiosas y los fieles son “misioneros como los discípulos de Jesucristo”. Y en la carta explica: “Una vez recibimos la fe cristiana de misioneros extranjeros, pero hoy es el momento de convertirnos en misioneros ad gentes para llevar la Buena Nueva”. A los sacerdotes y consagrados les dice que “están específicamente llamados a la obra misionera. Suigiendo a Jesucristo abandonan su hogar y dedican toda su vida a la obra misionera”, incluso yendo “a nuevos lugares, con nuevas culturas, costumbres e idiomas, donde predicar el Evangelio y también padecer el sufrimiento y la persecución”.
Los laicos, recordó, “participan en el trabajo misionero involucrándose en estructuras seculares y llevando a cabo servicios sociales. Hoy en día, cumplir con las obras de misericordia es el mejor trabajo misionero para los laicos”, aseguró. Además, los misioneros enviados a tierras lejanas “necesitan todo el apoyo y la oración que los laicos les puedan ofrecer”, subrayó. El arzobispo recordó que “en Bangladesh, el anuncio del Evangelio aún no ha llegado a muchos lugares, y muchos esperan saber sobre Jesucristo. Por eso, debemos trabajar más activamente como misioneros, tanto los sacerdotes y religiosos como los laicos”.
Mons.eñor Costa concluye: “En los últimos 500 años, me he dado cuenta de que hemos tenido vida, fe cristiana, misioneros, catequistas, buenos líderes y nos hemos convertido en miembros del Reino de Dios. Ahora es el momento de devolver lo que hemos recibido. Es hora de enviar misioneros a otros países. Ahora el Señor nos llama a predicar su mensaje”.
Bangladesh, de 166 millones de habitantes, en su mayoría musulmanes, solo el 0.3% de la población es cristiana. En todo el país hay aproximadamente 4 millones de católicos. La archidiócesis de Chattogram cuenta con 30.269 católicos.
Publicar un comentario