Minya (Agencia Fides) - El jefe de las fuerzas armadas egipcias Abdel Fattah al-Sisi ha confirmado públicamente su candidatura para las elecciones presidenciales que se celebrarán en Egipto el próximo abril. “No tengo otra opción que no sea la de responder al llamamiento del pueblo egipcio”, ha dicho Al-Sisi en una entrevista con el periódico de Kuwait al-Seyassah.
“La candidatura oficial de Al-Sisi”, dice a Fides el Obispo de Minya de los coptos católicos Boutros Fahim Awad Hanna “es un hecho importante para todo el país, no sólo para los cristianos. En el último año, Al-Sisi ha jugado un papel clave en el hacer que Egipto caminase hacia delante siguiendo la road map establecida para salir de la crisis. Su postura y sus opciones han sido apreciadas por la mayoría de la gente. El creciente consenso que le rodea también se puede percibir en las plazas, y es registrado por los medios de comunicación”. La proveniencia de Al-Sisi del mundo militar según Anba Fahim Hanna no contradice en sí la legitimidad democrática de su candidatura: “Al-Sisi”, dice el obispo copto católico de Minya “dejará el ejército y el cargo de ministro de defensa. Como ciudadano egipcio, tiene derecho a presentarse candidato como todos los demás. Lo importante es que haya otros candidatos destacados que puedan competir con él, con el fin de lograr elecciones verdaderamente democráticas. Al-Sisi y los demás candidatos presentarán cada uno su propio programa, y luego la elección será del pueblo”.
En la opinión del obispo Fahim Hanna, la re-afirmación probable de Al-Sisi en las próximas elecciones presidenciales no se debe interpretar como la instauración de un régimen militar disfrazado: “Después de lo que ha sucedido en los últimos años”, dice a la Agencia Fides el obispo copto católico “mantendrá el apoyo del pueblo solamente quién gobierne con justicia, de conformidad con la Constitución y según el método democrático”. Frente a la nueva situación, los jefes de las iglesias cristianas están llamados a ejercer un discernimiento adecuado: “Como hombres de la Iglesia, por lo menos en cuanto a las Iglesias católicas”, explica Anba Fahim Hanna, “debemos abstenernos de indicar a los fieles uno u otro candidato. Cada creyente es libre de elegir de acuerdo a su conciencia, basándose en el programa que crea más convincente. Nosotros, los obispos debemos mantener una actitud reservada, evitando dar pretextos a los que acusan a las iglesias de maniobras políticas”. (GV) (Agencia Fides 6/2/2014).
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