Islamabad (Agencia Fides) – “¿Quién ha asesinado al cristiano Sabir Masih?”: es el grito que se eleva desde la Iglesia y la sociedad civil en Pakistán pidiendo una investigación independiente y una autopsia exhaustiva tras la misteriosa muerte de un hombre, que murió el 12 de febrero en circunstancias desconocidas, mientras se encontraba bajo custodia policial. Según la información de la Agencia Fides, ayer activistas, grupos de la sociedad civil, organizaciones cristianas y musulmanas, sacerdotes, religiosos y laicos llevaron a cabo una manifestación de protesta masiva en Islamabad, para expresar su indignación y exigir justicia.
Sabir Masih, de 32 años, pertenecía a una familia pobre que vive en un barrio pobre de Islamabad. Fue detenido por la policía bajo sospecha de robo y encarcelado en la comisaría de Kohsar. Tres días después se comunicó su muerte, y su cuerpo fue llevado al hospital para una autopsia. La versión de la policía es que “se suicidó en el baño: Sabir se ahorcó con su cinturón”.
Una declaración conjunta de las organizaciones cristianas y redes de la sociedad civil en Pakistán, enviado a la Agencia Fides afirma: “Rechazamos enérgicamente esta falsedad flagrante, ya que no es físicamente posible en las circunstancias dadas. Condenamos enérgicamente el asesinato. Exigimos justicia y transparencia”. Se solicita además una nueva autopsia, que se realice en un hospital privado, los activistas denuncian la presión policial a la familia de la víctima para enterrar el cuerpo de Sabir Masih inmediatamente y están recurriendo a los tribunales para iniciar una investigación judicial independiente, la formación de un equipo que incluye a miembros de la la sociedad civil y un representante de la comunidad cristiana de Pakistán. Se pide que se aclare la responsabilidad de los agentes de la policía, deteniendo e interrogando al personal de guardia en la estación de Kohsar en el momento del asesinato.
“Es tiempo de frenar la tortura generalizada y la brutalidad de la policía, de poner fin a las ejecuciones extrajudiciales en Pakistán y defender el estado de derecho”, dice la nota enviada a la Agencia Fides.
Uno de los líderes que está trabajando para aclarar la historia de Sabir Masih, es la activista musulmán Tahira Abdullah, que explica a la Agencia Fides: “¿Dónde están los representantes de los ciudadanos paquistaníes no musulmanes elegidos en el Parlamento? Ahora tienen que hablar alto y claro, no importa a qué partido político estén afiliados. Este es el momento para nosotros musulmanes de mostrar nuestra solidaridad con todas las víctimas de la tortura, sobre todo cuando son de clase baja y pertenecen a las minorías no musulmanas. La experiencia, de hecho, nos enseña que son más vulnerables a la discriminación, la detención, la tortura y las ejecuciones extrajudiciales”. (PA) (Agencia Fides 14/2/2014)
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