Johannesburgo – “Ha sido una situación angustiosa la que se ha verificado en los puestos fronterizos de Lesotho, Mozambique, Sudáfrica y Zimbabwe, al inicio y al final de las vacaciones de Navidad para muchos migrantes que viven y trabajan en Sudáfrica”, dicen en una nota conjunta enviada a la Agencia Fides Su Exc. Mons. Estanislau Marques Chindekasse, Obispo de Dundo , y Su Exc. Mons. Willem Christiaans, Obispo de Keetmanshoop .
“La causa de esta angustiosa y caótica realidad son los enormes retrasos en la elaboración de la documentación y en las pruebas del Covid-19”, afirman los dos obispos que remarcan que cientos de personas sin mascarillas permanecieron hacinadas en espacios masificados, sin las distancias sociales que exigen los protocolos relacionados con la pandemia. Varias personas permanecieron por periodos excesivamente largos en puestos fronterizos esperando ser analizadas sufriendo deshidratación y sin acceso a alimentos e incluso sin servicios higiénicos. También quienes poseían ya un certificado negativo de Covid-19 permanecieron en cola durante períodos prolongados hasta llegar a caducar sus certificados.
“El Papa Francisco nos exhorta a ser una generación que cambia la historia, a escuchar el grito de los pobres y a comprometernos a poner fin a su marginación”, afirman los dos prelados. “Toda persona que cruza las fronteras de su país busca protección y una vida mejor y segura para sí misma y su familia. Son nuestros hermanos y hermanas en Cristo quienes necesitan nuestra comprensión, aceptación y colaboración. Los medios de comunicación informaron que lamentablemente cientos de ellos tuvieron que regresar porque no tenían la documentación adecuada para poder emigrar”.
“Es importante enfatizar que todos los países tienen el deber de seguir las políticas globales de la pandemia Covid-19 que requieren que los viajeros tengan un certificado Covid-19 negativo, así como asegurar que las personas no estén infectadas para prevenir la propagación del virus a otros”, dice el mensaje, agregando sin embargo que “la dolorosa situación en los puntos de entrada, particularmente en las fronteras terrestres, ha revelado la miríada de desafíos que deben enfrentar los distintos gobiernos y organizaciones de la sociedad civil en la región”.
Para abordar la situación, los dos obispos proponen una serie de medidas: mayor apoyo/concienciación de la población antes de emprender un viaje para cruzar la frontera, especialmente durante la pandemia de Covid-19; anuncio tempestivo de los bloqueos fronterizos por parte de los gobiernos con la provisión de medios de vida en los puestos fronterizos para los bloqueados; medidas de salud pública que ponen la vida real de las personas en el centro. “No hay esperanzas de frenar con éxito la propagación de la pandemia si los gobiernos no dan prioridad a las personas”, dicen los obispos. “Cualquier medida de salud pública que no esté centrada en las personas es solo una representación teatral de los gobiernos del sur de África”
Sudáfrica ha registrado alrededor de 1,2 millones de casos de Covid-19, con un aumento reciente en los contagios debido a una nueva variante del virus que ha visto aumentar los números en casi un tercio. Los Centros Africanos para el Control y la Prevención de Enfermedades dicen que se han registrado más de tres millones de casos en el continente desde el inicio de la pandemia, y en Sudáfrica se encuentran más del 30% de los casos.
Publicar un comentario