ASIA/BANGLADESH - Carta pastoral del obispo de Rajshahi: “Un Jubileo de bendición”

Rajshahi – “La celebración del Jubileo de plata de la diócesis de Rajshahi tiene como intención dar gracias a Dios por todas las bendiciones que ha dado a la diócesis en su historia”: lo afirma la Carta Pastoral enviada a todos los fieles por Su Exc. Mons Gervas Rozario, con motivo del 25° aniversario de fundación de la diócesis católica de Rajshahi. Las celebraciones por el evento, que alcanzará su momento central los días 10 y 11 de septiembre de 2015, estarán acompañadas por la visita pastoral del Card. Fernando Filoni, Prefecto de la Congregación para la Evangelización de los Pueblos.
En la carta pastoral, enviada a la Agencia Fides, el obispo recuerda la historia de la iglesia local: “El 21 de mayo del 1990, la diócesis de Rajshahi fue erigida canónicamente, guiada primero por el obispo Mons Patrick D'Rozario, C.S.C, y en los años sucesivos por Mons Paulinus Costa. EN el principio la diócesis contaba con siete parroquias, hoy son 19 y la 20 está en proceso. Gracias a la obra pastoral de sacerdotes diocesanos, de misioneros del PIME, de religiosas, catequistas y fieles, la iglesia camina y acoge los frutos de la gracia”.
Entre las prioridades pastorales de la diócesis, señala el obispo en el texto, desde el principio estaban la evangelización y la obra de instrucción, puntos que hoy siguen siendo fundamentales. La evangelización ha seguido entre las comunidades indígenas de los Adivasi “para difundir el amor de Cristo a través del desarrollo económico y social de los pobres, dando asistencia sanitaria y en el testimonio de misericordia, justicia y paz”. Además el camino de “renovación de la iglesia local se ve continuado en las familias, en las parroquias, a través de una profunda adhesión al Evangelio”. “Hoy hay muchas personas que quieren escuchar la Palabra de Dios. Se les debe predicar la Palabra de Dios con gran atención”, escribe el obispo Rozario.
Además “la iglesia de Rajshahi siempre está pendiente de los pobres y comprometida con obras de misericordia, a las que se dedican sacerdotes diocesanos y religiosos, hermanas y catequistas”, reitera el texto, afirmando que toda la comunidad se está preparando para vivir con alegría y con compromiso profundo el Año de la Misericordia proclamado por el Papa Francisco, como una nueva oportunidad de testimonio evangélico y de misión.