Intibucá - La grave sequía provocada por El Niño ha causado la pérdida de cosechas enteras, que son la única fuente de alimento para muchas familias hondureñas. En algunos lugares del país, la merienda escolar es la única comida que permite que los niños resistan a la hambruna. En muchas comunidades, los niños van a la escuela en su mayoría para tener algo que comer. Uno de los municipios donde la situación es más precaria es Yamaranguila, Intibucá, que registra un nivel muy alto de inseguridad alimentaria. Abundan los campos que se han secado, los animales raquíticos y las personas que no tienen nada que comer.
En la escuela del municipio los niños hacen largas filas con sus platos y vasos de plástico para recibir la merienda. Algunos sólo comen una parte, reservando el resto para llevarlo a casa para compartirlo con la familia. En total, en Honduras, la sequía afecta a la vida de 161.403 familias de 146 municipios. El gobierno está poniendo en práctica un plan de acción para llevar alimentos y ayuda. Cada ración que se da a las familias contiene cinco kilos de arroz, cinco kilos de azúcar, cinco kilos de frijoles, dos kilos de harina de maíz, un kilo de café, dos kilos de mantequilla, dos kilos de espaguetis y uno de pasta.
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