Dar es Salaam - “Oramos para que las víctimas del naufragio descansen en paz. Queremos expresar nuestra cercanía a los heridos y a los supervivientes del accidente. Oramos para que Dios les conceda una pronta recuperación”, afirma el mensaje de condolencia firmado por Su Exc. Mons. Gervas John Mwasikwabhila Nyaisonga, Obispo de Mpanda, en nombre de la Conferencia Episcopal de Tanzania , por las victimas del naufragio del ferry que se hundió el 20 de septiembre en el Lago Victoria.
En su mensaje los obispos dan las gracias por los esfuerzos realizados por los pescadores, la policía, los scout y todos los que han ayudado a socorrer a las victimas.
El 21 de septiembre, un telegrama firmado por Su Eminencia el cardenal Pietro Parolin, secretario de Estado, en nombre del Papa Francisco expresaba: “su más sincera solidaridad hacia quienes lloran la pérdida de sus seres queridos y temen por las vidas de aquellos que todavía faltan” e invocaba la bendición divina para que sea “fuerza y consuelo para todos los afectados” alentando “a las autoridades civiles y al personal de las unidades de emergencia en sus actividades de rescate”.
Según el ministro de transportes de Tanzania, a bordo del ferry había 265 personas cuando se hundió. Esto a pesar de que la embarcación contaba con una capacidad máxima de transporte de unas cien personas. Las victimas ascienden a 224 de las cuales 126 son mujeres, 71 hombres, 17 chicas y 10 chicos. Los supervivientes han sido solo 41. El capitán de la embarcación ha sido arrestado.
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