Manila – Tomar medidas sobre el cambio climático es urgente y es una “cuestión de justicia social”, lo afirma un mensaje de la Conferencia episcopal de las Filipinas, que, citando la encíclica del Papa Francisco “Laudato Si” invita a los cristianos a ser “apasionados en el custodiar el ambiente”. Esto puede suceder, dicen los obispos, como resultado de una transición: del sentirse “dueños” de la creación a sentirse “administradores”.
En el texto publicado el 20 de julio y enviado a la Agencia Fides, los obispos filipinos invitan a todos los fieles y personas de buena voluntad a centrar su atención en la próxima Conferencia Mundial de París, que se celebrará en diciembre de 2015 sobre el tema del cambio climático y sus efectos.
“La Laudato Si nos enseña que el quid de la cuestión del cambio climático es la justicia”, señalan los Obispos, recordando que “la noción de bien común se extiende a las generaciones futuras”. Respetando los conceptos de “desarrollo sostenible” y “solidaridad intergeneracional”, el texto señala: “Pensando en el tipo de mundo que estamos dejando a las generaciones futuras, miramos las cosas de una manera diferente; nos damos cuenta de que el mundo es un don que hemos recibido gratis y tenemos que compartir con los demás”. “No podemos ver la realidad de forma meramente utilitaria - continúan - donde la eficiencia y la productividad están orientadas exclusivamente al beneficio individual. La solidaridad intergeneracional no es una opción, sino una cuestión fundamental de justicia”.
Los obispos también se comprometen a promover una formación pastoral en los temas del cambio, para garantizar una adecuada comprensión del problema y pautas correctas para un “discernimiento colectivo”: la reflexión de la comunidad eclesial sobre el bien común “debería influir en los responsables políticos y traducirse en acción” concluyen
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