Beirut (Agencia Fides) - Si quiere sobrevivir, el Líbano tiene que optar por la estrategia de mantenerse al margen de los conflictos que sacuden Oriente Medio. Este es el llamamiento, claro y alarmado, que el arzobispo maronita Boulos Youssef Matar ha querido introducir en la homilía de la Misa celebrada en Beirut ayer lunes 9 de febrero con motivo de la Fiesta de San Marón, mientras el país de los cedros sigue lidiando con la crisis política e institucional que desde el pasado mes de mayo impide la elección de un nuevo Presidente de la República.
En su homilía, el arzobispo maronita de Beirut ha calificado como un grave error la idea de hacer que la elección del Presidente libanés dependa del resultado de los conflictos y de los juegos de poder que dominan esta etapa de la historia de Oriente Medio. “No es bueno para nuestra región ni para el mundo, la decisión de vincular el destino de Líbano con lo que ocurre en otros países”, ha reiterado Mons. Matar, usando expresiones críticas hacia la clase política nacional que está eludiendo sus responsabilidades y parece querer “congelar” la escena política libanesa a la espera de saber qué fuerzas regionales y globales prevalecerán en la reestructuración de los equilibrios que tienen lugar en el cuadrante de Oriente Medio (GV) (Agencia Fides 10/2/2015).
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