Río de Janeiro (Agencia Fides) – El arzobispo de Río de Janeiro, Su Exc. Mons. Orani João Tempesta, recientemente nombrado Cardenal por el Papa Francisco, ha cuestionado el sistema penitenciario brasileño, y señalado que las cárceles del país “no re-educan” a los internos. Según la nota enviada a la Agencia Fides, el Arzobispo se reunió con el Presidente de Brasil, Dilma Rousseff, en el palacio presidencial, en Brasilia, el 21 de enero, y en esta ocasión, expresó su preocupación por las cárceles de Brasil, que están en una situación de crisis tremenda. “Aunque se puede decir que hay nuevas cárceles, todavía no conseguimos que la gente que vive allí para ser reeducada, que adquiera una forma adecuada de vida y pueda volver a la sociedad”, dijo el arzobispo.
Sus palabras fueron ampliamente recogidas por la prensa porque la situación de las cárceles brasileñas ha atraído la atención de las organizaciones internacionales después de la violencia del año pasado en las cárceles del estado de Maranhao, donde 62 personas murieron en el transcurso de 2013. En el año 2014 el centro penitencial Pedrinhas, uno de los más violentos en el país, siempre en el estado de Maranhao, ya ha registrado tres muertes, la última el 21 de enero. Pedrinhas refleja la realidad de la situación en el sistema penitenciario brasileño. Según un estudio oficial reciente, publicado en la prensa local, las prisiones de Brasil pueden acomodar a 306.497 prisioneros, pero a finales de 2011 ya eran 514.582 presos. El ministro de Justicia ha anunciado la construcción de nuevos locales para los centros penitenciarios, con el objetivo de llegar a 62.000 nuevos puestos antes de finales de 2014, aunque estos no cubrirán el déficit actual de 208.000 plazas (CE) (Agencia Fides, 23/01/2014)
Publicar un comentario