Dakar (Agencia Fides) - “Nuestro compromiso con la paz no depende de simples consideraciones humanas: proviene del don de la 'Paz' que Cristo ha hecho a nuestros corazones; en este sentido la jornada de ayuno y oración por la paz en Siria es también una jornada por la paz en nuestros corazones”, ha afirmado Mons. Luis Mariano Montemayor, Nuncio apostólico en Senegal, en Guinea Bissau y Cabo Verde, el sábado, 7 de septiembre en la vigilia de oración por la paz en Siria, Oriente Medio y en el mundo, organizada por la Archidiócesis de Dakar, en la iglesia de Saint Pierre de Baobabs, en comunión con la Iglesia universal, que ha acogido el llamamiento hecho por el Papa Francisco.
Mons. Montemayor luego ha agregado: “Como consecuencia, tras el llamamiento del Santo Padre, llega, para nosotros, el tiempo de movilizarnos y actuar en nuestra vida cotidiana signos eficaces de solidaridad con el pueblo sirio que sufre profundamente. La inacción personal significaría una traición a los hermanos y hermanas que están en necesidad en Siria, y lo más importante, daría lugar a un grave pecado de omisión digno de la ira de Dios”.
El Nuncio no ha ocultado las dificultades de la situación que se ha creado en Siria y en Oriente Medio. “Como diplomático con una cierta experiencia de las crisis internacionales, no ocultaré que no hay soluciones mágicas para esta crisis. La lógica estricta de los intereses nacionales egoístas y de los diversos grupos de presión están activos con vigor desde hace tiempo y pueden impedir cualquier solución racional a esta crisis”.
“Pero nada es imposible para Dios”, enfatiza Mons. Montemayor, quien concluya su reflexión invocando la ayuda de la Virgen María, Reina de la Paz. (L.M.) (Agencia Fides 9/9/2013)
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