Merlo – El obispo de la diócesis de Merlo-Moreno, Su Exc. Mons. Fernando Carlos Maletti, ha denunciado que no hay voluntad política para resolver el conflicto que está afectando a miles de personas que se han acampado a lo largo de la carretera provincial 1003, en la provincia de Buenos Aires, ocupando casas populares y terrenos privados.La primera ocupación se produjo el 21 de octubre, en un área designada por el plan federal para 340 viviendas sociales, y luego ha continuado con la ocupación de otras tierras cercanas, de propiedad privada.
Según las denuncias, parecen ser unas 3 mil familias las que en los días precedentes a las elecciones del 25 de octubre se han asentado en la zona.
El obispo, que ha visitado la zona de 60 hectáreas, en la que se han instalado unas 3 mil familias, ha subrayado que no hay una preocupación real por asistir a las personas que ocupan el lugar ni por garantizar la paz y la tranquilidad de los vecinos de los barrios adyacentes.
“Vemos con preocupación que las autoridades salientes se despreocupen del problema, pero también notamos que las que van a asumir el cargo no han reaccionado con fuerza suficiente, lo que lleva al desconcierto de los ciudadanos” ha dicho el obispo según la nota enviada a Fides por una fuente local. Para Mons. Maletti es un “deber ineludible del Estado tomar cartas inmediatamente en el asunto” y evitar que empeore el “clima de violencia y de temor” que se percibe en la comunidad.
Mons. Maletti ha publicado una carta en la que reflexiona sobre el manejo de la tierra y las viviendas en los grandes conglomerados urbanos, y advierte que los pobres “son quienes más sufren las consecuencias de las ambiciones y la ausencia o anuencia de las autoridades estatales ante los abusos”.
“Hemos visto cómo se han aprovechado de esa situación algunos movimientos sociales y políticos - afirma el obispo - quienes han elevado las legítimas banderas de la violación de los derechos para lograr posicionarse en el espacio público, pero sin un interés genuino en resolver de manera justa los conflictos”. “La comunidad católica de Merlo-Moreno no puede permanecer ajena ante estos hechos que ponen en riesgo la paz de la comunidad y constituyen un grito de alerta en torno a las condiciones de vida de los pobres y el uso del suelo en la periferia” ha escrito Mons. Maletti.
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