Juba (Agencia Fides) – Los líderes religiosos locales están en primera línea para calmar las tensiones en la zona fronteriza entre Sudán del Sur y Uganda, que se han encendido entre los residentes de Kajo Keji-(Sudán del Sur) y los de Moyo (en Uganda). Las dos comunidades se han convertido en los protagonistas de una serie de ataques y represalias a lo largo de la frontera entre los dos estados. Los sudaneses del sur acusan a los residentes de Moyo de destruir 90 viviendas y robar 37 cabezas de ganado durante una incursión en el territorio de Sudán del Sur. En represalia, 12 mujeres ugandesas han sido secuestradas en Moyo y llevadas a Kajo-Keji. En los últimos enfrentamientos, al menos, 7 personas han perdido la vida.
Su Exc. Mons. Erkolano Lodu Tombe, Obispo de Yei ha lanzado una invitación a la reconciliación entre ambas comunidades. Mons. Lodu Tombe ha instado a los residentes a no devolver mal por mal, y a tener confianza en las acciones del gobierno de los dos países para resolver la disputa fronteriza. El obispo ha pedido también a los dos gobiernos que aceleren los procedimientos para demarcar la frontera con el fin de evitar nuevas tensiones e incidentes.
El obispo anglicano de Kajo Keji-, el reverendo Anthony Poggo, también ha hecho un llamamiento a las dos comunidades para que cese inmediatamente la violencia. Dos delegaciones, cada una compuesta por una veintena de personas en ambas comunidades, han pedido de mutuo acuerdo a los gobiernos de Uganda y Sudán del Sur que controle y demarque la frontera lo antes posible, una tarea pendiente desde hace más de 50 años.(L.M.) (Agencia Fides 23/9/2014)
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