Islamabad (Agencia Fides) – Una joven cristiana ha sido asesinada por los talibanes paquistaníes en la región norte de Pakistán. Según la información de la Agencia Fides, la chica, conocida con el seudónimo de Lily, había pasado unos meses en fuga y en la clandestinidad junto con su primo, un musulmán convertido al cristianismo hace unos años. Después de la conversión, el hombre ha sido considerado “apóstata” y desde entonces está en la mira de los talibanes, que tiene la intención de eliminarlo. En los últimos días, los militantes descubrieron el escondite de ambos: mientras se daban a la fuga, la chica fue alcanzada por una bala y murió, mientras que el hombre, por el momento, ha conseguido escapar. En una nota enviada a la Agencia Fides, la comunidad cristiana expresa su indignación y consternación, pidiendo la intervención de las instituciones civiles para defender los derechos de las minorías y de todos los ciudadanos contra la violencia talibana.
Pakistán acaba de anunciar la suspensión de los ataques aéreos contra los talibanes en respuesta al mes de tregua declarada por los “estudiantes del Corán”. El gobierno ha precisado, sin embargo, que se reserva el derecho de “responder a cualquier actividad violenta” llevada a cabo por los talibanes. El diálogo entre el gobierno y los talibán en Pakistán está en un callejón sin salida: en las últimas semanas, los militantes islámicos han dicho al gobierno que “no hay posibilidad de paz en el país a menos que Pakistán cambie su sistema político y legal y adopte oficialmente la ley islámica”. El gobierno del primer ministro Nawaz Sharif está buscando una “solución negociada”, después de años de conflicto con los militantes, pero las conversaciones se interrumpieron en febrero tras una serie de ataques terroristas de los talibanes. Recientemente, el gobierno de Pakistán ha presentado un proyecto de ley en el Parlamento, titulado “Políticas sobre la seguridad nacional” que pretende poner fin a la violencia y al terrorismo en el país. La lucha contra el terrorismo ofrece actividades diarias de represión, análisis estratégico, operaciones en el campo. Al presentar la ley, el primer ministro Sharif ha explicado que “el gobierno ha promovido el diálogo con los talibanes”, pero, si estos no demuestran que han adoptado y cumplido con el “alto el fuego”, “el ejército responderá de forma adecuada”. (PA) (Agencia Fides 3/3/2014)
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