Tikrit (Agencia Fides) - Mientras que la reciente ola de violencia parece empeorar día a día, la situación humanitaria en Iraq es extremadamente preocupante, especialmente en Mosul y en el gobernatorado de Al-Anbar, situado al noreste del país. Varios cientos de miles de personas están viviendo en escuelas, mezquitas, edificios en construcción o como huéspedes de familiares, y necesitan urgentemente de agua, vivienda, alimentos y atención médica de emergencia. A raíz de los graves daños sufridos en el hospital de Médicos sin Fronteras en Tikrit durante el bombardeo de la ciudad el 13 de junio, que ha dejado privada de atención médica a unas 40 mil personas desplazadas por la reciente escalada del conflicto, el MSF ha lanzado un llamamiento a todos los partes en conflicto para que respeten al personal y a las estructuras sanitarias y ahorren las vidas de los civiles. A pesar de las condiciones de seguridad extremadamente precarias, los equipos de MSF han distribuido kits de primeros auxilios a 250 familias en la ciudad de Bashiqa, en el distrito de Mosul; también han montado clínicas móviles en Bashiqa y Tess-Kharab (entre Erbil y Mosul) y en el área entre Dohuk y Mosul, donde miles de personas han buscado refugio. MSF también tiene previsto abrir una clínica en Kirkuk y fortalecer sus equipos quirúrgicos en Tikrit y Hawijah. Si se garantizarán las condiciones de seguridad necesarias, la Ong continuará distribuyendo botiquines de primeros auxilios a las personas desplazadas más vulnerables en las zonas en las que la organización está presente desde 2006. Desde abril siguen prestando asistencia a las personas desplazadas en Tikrit, que han huido de Faluya en los últimos meses. En las últimas semanas, la Ong ha proporcionado equipo de primeros auxilios, tales como kits de higiene y mantas, a 3.000 familias. (AP) (21/6/2014 Agencia Fides)
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