Islamabad (Agencia Fides) – Desconcierto y amargura en la comunidad cristiana en Pakistán, después de que un tribunal en Islamabad haya absuelto este sábado a Khalid Chishti, el imán que había hecho acusaciones de blasfemia falsas contra la chica católica discapacitada mental Rimsha Masih. Un año después de los hechos, el caso de agosto-septiembre de 2012, ha causado un gran revuelo en Pakistán y en todo el mundo y ha sido tomado como un ejemplo de abuso de la ley de la blasfemia. El juez absolvió al Imam después de que los testigos oculares retiraran sus declaraciones acusándolo de planear un complot. Después de las acusaciones falsas, los musulmanes radicales atacaron el barrio cristiano de Mehrabadi y muchas familias cristianas han tenido que huir para salvar sus vidas.
En una declaración enviada a la Agencia Fides, el abogado cristiano Sardar Mushtaq Gill, director de la ONG cristiana “Legal Evangelical Assistance and Development” (LEAD), dice estar “profundamente decepcionado por el veredicto del Tribunal, teniendo en cuenta la evidente y probada culpabilidad de Chishti”. Su absolución, de hecho, “solo generará nueva impunidad y secundará a aquellos que abusan de la ley de la blasfemia”. El abogado pide al gobierno de Pakistán “que derogue todas las leyes discriminatorias, incluyendo la ley sobre la blasfemia”.
En los casos de supuesta blasfemia, los acusados y sus familias - más aún si son miembros de minorías religiosas - están en peligro constante de muerte, de posibles ejecuciones extrajudiciales. Actualmente, Rimsha y su familia encontraron asilo en Canadá, ya que aún estaban en peligro. También en las investigaciones y procesos, la policía y el poder judicial están bajo la presión de los grupos extremistas islámicos y a menudo protegen o pactan con los acusados musulmanes. (PA) (Agencia Fides 19/8/2013)
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