Mandalay (Agencia Fides) – “Un gran cambio está teniendo lugar en nuestro país. En varias ciudades, donde había casas hechas de madera y bambú, aumentan las estructuras de hormigón. En la percepción de muchos, esto es una señal de progreso. Pero el cambio más importante es que, entre los nuevos edificios, se ven surgir colegios e instituciones educativas privadas, creadas para responder al profundo interés en la educación. Se trata de un desarrollo que es realmente gratificante”. Lo dice en una nota enviada a la Agencia Fides, Su Exc. Mons. Paul Grawng, Arzobispo de Mandalay, al hablar sobre el tema de la educación, algo fundamental para la vida y el futuro de un pueblo.
“Muchos están tomando la oportunidad de realizar el valor verdadero que, más allá del desarrollo material, es decir, la formación del corazón y la mente de los ciudadanos, esencial para un desarrollo humano integral”, señala el Arzobispo. “Lo que trae a la mente la pequeña escuela bíblica que tuve el privilegio de visitar hace 40 años, en una parroquia situada en una zona montañosa remota. Allí, un párroco anciano se preocupaba por la construcción del futuro de los jóvenes, en una humilde estructura de bambú, con el suelo de tierra, expuestos a la intemperie. Era toda una hazaña, dedicada a los chicos y chicas de los pueblos cercanos Aquel anciano párroco mostró un gran amor por Dios y por su pueblo, enseñando a los estudiantes la Palabra de Dios, los valores culturales y morales, peor también los rudimentos del Inglés, francés, música y la cultura en general. Esa pequeña escuela ha ayudado a los jóvenes de las montañas a vivir una vida digna, en armonía con la naturaleza y con los valores culturales de la comunidad. Esos pueblos indígenas eran maravillosamente cercanos al Evangelio”.
Mons. Paul Grawng concluye: “Ahora, en esta nueva era de cambios, estamos llamados a apoyar a los nuevos centros de aprendizaje e instituciones educativas que están surgiendo, para que puedan ayudar a educar y formar personas libres, que puedan vivir y creer en la verdad y la libertad de los hijos de Dios”. (PA) (Agencia Fides 4/7/2014)
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