Nairobi - Dos meses después de la reapertura de las escuelas en Kenia, los bancos de las clases siguen vacías. La falta de acuerdo sobre el aumento de los salarios entre el gobierno y el sindicato de maestros está causando una huelga indefinida de los docentes. En un comunicado del AVSI enviado a la Agencia Fides se lee que el parón general de la escuela pública está teniendo graves repercusiones en el sistema educativo del país que y a es frágil de por sí. Millones de estudiantes, de hecho, se ven obligados a permanecer en casa, a menudo sin sus padres, ya que trabajan ambos.
No ir a la escuela para muchos niños en Kenia significa perder la oportunidad de aprender, pero también de renunciar a una comida y a un lugar seguro para pasar el día. Para hacer frente a este fenómeno, AVSI ha creado un lugar de encuentro para los niños en el Centro Otiende en los barrios pobres de Kibera en Nairobi. Además, un educador está disponible para los problemas y necesidades de las familias. Otro punto de escucha se ha activado en la capital de Kahawa y se han organizado cursos para-escolares para garantizar la continuidad en la formación y asegurarles un lugar seguro y una comida completa.
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