Jerusalén – Las medidas de seguridad impuestas por las autoridades israelíes en Jerusalén - a partir de las que se desarrollen en la Ciudad Vieja - están causando la cancelación de las peregrinaciones, “lo que significa el colapso masivo del sector turístico, especialmente en Belén, donde la mayor parte de las personas dependen de este sector para asegurarse el acceso a los medios de subsistencia”. Este es uno de los efectos secundarios de los puesto de bloque policiales organizados por el gobierno de Israel, especialmente en Jerusalén Este, después de la nueva escalada de violencia en Tierra Santa que ya ha causado la muerte de al menos 39 personas.La alarma sobre el impacto de las medidas de seguridad sobre las peregrinaciones la ha lanzado Cáritas Jerusalén, en un comunicado difundido hoy y firmado por el Presidente General, el P. Raed Abusahaliah. La cancelación de los permisos para entrar en Jerusalén o Israel - denuncia Cáritas Jerusalén - “dará lugar a un aumento del desempleo y de dificultades económicas para miles de familias trabajadoras” que dependen totalmente de lo que pueden ganar a través de su trabajo diario. “No negamos que la situación es difícil”, se lee en el comunicado, enviado a la Agencia Fides, “pero hacemos un llamamiento a todos nuestros hermanos y hermanas cristianos a venir y no tener miedo: no nos dejen solos”. .
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