Madang (Agenzia Fides) – “La violencia doméstica en las familias y la violencia sexual son motivo de gran preocupación en Papua Nueva Guinea. Es un problema generalizado y grave contra el que tenemos que luchar trabajando todos juntos”, lo ha dicho Su Exc. Mons. Stephen Reichert, OFM Cap, Arzobispo de Madang, al hablar en la inauguración del nuevo “Centro para la Familia contra la violencia doméstica”, promovido por el gobierno de Madang. El Centro también contará con un equipo especial de la policía local, dedicado a la investigación de casos de violencia doméstica y sexual.
Según lo informado a la Agencia Fides, el Arzobispo ha explicado: “Durante muchos años, las familias han ocultado la violencia doméstica. Se han encubierto crímenes horrendos, como la violación de niños y palizas brutales mujer e hijos. Castigar a los responsables y compensar a las víctimas es el camino que se quiere seguir. Pero no son un disuasivo suficiente para detener el fenómeno”.
Mons. Reichert señala que es urgente un cambio de la cultura y de la mentalidad y un cambio del corazón. Por esta razón, todos los componentes del Estado, las iglesias, el gobierno, los grupos de la sociedad civil, están llamados a unirse para decir: “¡No más violencia en la familia! ¡No más crímenes de violencia sexual! ¡No más violencia contra las mujeres! ¡No más violencia contra los niños! Trabajamos juntos para detener la violencia”.
La Iglesia de Madang trabajará para ayudar a detener la violencia. En primer lugar tratando de sensibilizar a la población sobre el hecho de que estos casos no pueden ser considerados “asuntos familiares”, sino que deben ser denunciados. Otro campo en el que la Iglesia tratará de ayudar es el de dar asistencia inmediata a las víctimas con el fin de romper el círculo vicioso de la violencia en el hogar. El nuevo equipo de la policía, por su parte, tendrá que investigar con prontitud y promover una acción fuerte y decidida con el fin de generar confianza en la población sobre la labor de la policía en la protección de todos los ciudadanos. (PA) (Agencia Fides 30/6/2014)
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