Río Branco – Acaba de ser inaugurada oficialmente este 1 de junio, aniversario del nacimiento en el cielo del Beato Juan Bautista Scalabrini , una nueva casa misionera para el servicio evangélico a los migrantes de las Hermanas Misioneras de San Carlos Borromeo, Escalabrinianos, en la Diócesis de Río Branco, Brasil. Según la información enviada a la Agencia Fides, la ceremonia para “cortar la cinta de inauguración” contó con la presencia del obispo de Río Branco, Su Exc. Mons. Joaquín Pertiñez, la hermana Neusa de Fátima Mariano, superiora general de la Congregación, junto con otras hermanas, y alrededor de 400 migrantes.
“Confiamos en que el Señor, por intercesión de María, Madre de los Migrantes, del Beato Juan Bautista Scalabrini, Apóstol de los migrantes, y de la Beata Assunta Marchetti, pueda sostener esta nueva presencia misionera de la Congregación, como una presencia de solidaridad y de acogida, en defensa de la vida y los derechos de los migrantes”, remarcó durante la ceremonia la hermana Neusa. “Las palabras de Jesús 'era un emigrante y me acogisteis' nos hacen entender, vivir y ver el rostro de Cristo en el rostro de cada migrante, especialmente en esta realidad tan vulnerable”, comentaron la hermana Zenaida Ziliotto, superiora provincial y la hermana Ires da Costa, pionera de esta misión junto con otras hermanas. La jornada terminó con una oración en la capilla de la comunidad Nuestra Señora Peregrina, de las Hermanas de Nuestra Señora, donde estuvieron presentes diferentes congregaciones.
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